En el año 2025, la Abadía de Montserrat celebra su milenario, un acontecimiento histórico que invita a reflexionar sobre su influencia espiritual y cultural en Cataluña. Fundada en el año 1025 por el abad Oliba, Montserrat ha sido un centro de fe, oración y cultura durante diez siglos, y su Virgen, la Moreneta, se ha convertido en un símbolo universal de devoción. Más que una conmemoración, este aniversario es una oportunidad para renovar la vivencia cristiana y la fidelidad a María, aquella que ha sido consuelo y fortaleza para generaciones de mujeres y hombres cristianos y de buena voluntad.
La celebración coincide con el Año Jubilar universal de la Iglesia, que, le da un sentido más profundo a actos como la Romería de Rubí. Esta peregrinación, que desde hace décadas expresa la fe del pueblo rubinense, adquiere este año un valor especial: es un signo de comunión entre la fe popular y la tradición montserratina. La Romería no es solo una tradición religiosa, sino también un testimonio de comunidad y de amor fiel a la Virgen. En este contexto doblemente jubilar, se convierte en una ocasión privilegiada para profundizar en el sentido de la peregrinación cristiana y redescubrir el valor de caminar juntos hacia Dios.
El milenario de Montserrat recuerda que este santuario no es sólo un legado del pasado, sino una realidad viva del presente. Montserrat sigue siendo una escuela de vida cristiana, donde María nos invita a escuchar la Palabra de Dios y a ponerla en práctica. La conmemoración de los mil años debe impulsar una renovación de la devoción mariana y del compromiso espiritual de las comunidades cristianas. Que este año sea una oportunidad para vivir con mayor intensidad la fe, y que la Romería de Rubí sea un signo vivo de esperanza y de fidelidad a la Moreneta, que nos acompaña y guía en la peregrinación de la vida.