Es necesario tener fuerza para estar correcto, pero es necesario coraje para ser gentil.
Es necesario tener fuerza para defenderse, pero es necesario coraje para plantar cara.
Es necesario tener fuerza para ganar una guerra, pero es necesario coraje para buscar la paz.
Es necesario tener fuerza para estar correcto, pero es necesario coraje para ser bondadoso y misericordioso.
Es necesario tener fuerza para superar los obstáculos, pero es necesario coraje para mantener el equilibrio aun en medio de engaños y traiciones.
Es necesario tener fuerza para sentir el dolor de un amigo, pero es necesario coraje para reconocer las propias debilidades.
Es necesario tener fuerza para reconocer los propios males, pero es necesario coraje para luchar contra ellos.
Es necesario tener fuerza para soportar un conflicto, pero es necesario coraje para hacerlo cesar.
Es necesario tener fuerza para soportar la soledad, pero es necesario coraje para pedir apoyo.
Es necesario tener fuerza para amar, pero es necesario coraje para ser amado.
Es necesario tener fuerza para sobrevivir, pero es necesario coraje para vivir.
Si sientes que te falta la fuerza y el coraje, ¡Quiera Dios que algún cirineo pueda abrazarte hoy con su calor y Amor!
Y que con el viento del evangelio, pueda llegarte una voz que te dirá que hay un Amigo, Cristo, que vive entre nosotros y que nunca te abandona si tú pones la fuerza y el coraje necesarios.