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Cuando se realizó el relevo del Cardenal Ricard Maria Carles por el Cardenal Lluís Martínez al frente del Arzobispado de Barcelona, salió una noticia que dejó a todos boquiabiertos: el Arzobispado de Barcelona se dividía en tres obispados que conformarían la Provincia Eclesiástica de Barcelona: el Arzobispado de Barcelona, el Obispado de Sant Feliu y el Obispado de Terrassa. Ayer sábado día 15, hizo veinte años que el Papa San Juan Pablo II firmó los decretos correspondientes. En aquel momento, la creación de los nuevos obispados fue un trastorno importante, nadie preveía la noticia ni lo veía claro. Ahora, veinte años después, con las realidades de los tres obispados consolidadas, después de un largo camino, es momento de mirar atrás, y dar gracias a Dios por el camino recorrido en las nuevas diócesis, y en la diócesis madre. En estos años, hemos ido tomando conciencia de ser diócesis, hemos experimentado la proximidad del obispo y de los organismos diocesanos, hemos aprendido a caminar juntos y a ser Iglesia diocesana en los dos Vallès.

En estos veinte años, dos obispos han estado al frente de la diócesis; el primer obispo fue Mons. Josep Àngel Saiz Meneses, ahora arzobispo de Sevilla, y Mons. Salvador Cristau lo sustituyó hace dos años como obispo diocesano. Y la Catedral-Basílica del Sant Esperit ha sido testigo de los grandes momentos de la vida diocesana: el inicio del ministerio de Mons. Josep Àngel Saiz, la Misa Crismal de cada año, la ordenación episcopal de Mons. Salvador Cristau, ordenaciones de presbíteros y diáconos, encuentros diocesanos, el inicio del ministerio de Mons. Salvador Cristau como Obispo diocesano y, ayer, la gran celebración de los veinte años de la diócesis, presidida por el Nuncio Apostólico. Todos estos momentos nos hacen descubrir que la Catedral es la Casa de toda la Diócesis.

Pedimos a la Virgen María, bajo la advocación de la Salud, que es nuestra patrona, que nos ayude a todos los diocesanos y diocesanas a ser testigos, semilla y fermento del Evangelio en este amplio territorio de los dos Vallès.