La ciudad de Manlleu, donde nació nuestro amado Beato, el Dr. Josep Guardiet y Pujol, ha querido dedicar un acto de homenaje a su hijo más ilustre en este mismo domingo, 15 de marzo, cuando muchos de vosotros estaréis leyendo la hoja parroquial. Este acto ha sido promovido por la parroquia de Santa María de Manlleu, con la colaboración del Ayuntamiento de esta población osonese. La parroquia de San Pedro de Rubí, de la que el Beato Josep Guardiet fue párroco durante veinte años y donde desarrolló una ingente labor religiosa y cultural, nos sumamos al acto de homenaje en el qual recordamos a nuestro santo pastor. La Asociación de Amigos del Dr. Guardiet ha trabajado mucho para que este acto de homenaje en Manlleu fuera posible y l’Esbart Dansaire de Rubí «fundado por nuestro beato» ha querido hacer también su aportación, lo cual es muy meritorio, puesto que, sin dejar una actuación en Breda por la tarde, que hace tiempo ya tenían comprometida, participan con otra actuación a mediodía en Manlleu, y así este domingo es para ellos un día más intenso; pero lo hacen con mucha ilusión.
En octubre del año pasado, la Hna. Pilar Adín, postuladora de la causa de canonización del Dr. Guardiet, el Sr. Miquel Montoliu y el Sr. Sebastià Colomer, presidente y tesorero de la Asociación de Amigos del Dr. Guardiet, junto con un servidor, fuimos a Manlleu para visitar la ciudad natal del Dr. Guardiet, entrevistarnos con el Sr. Joan Arimany, historiador, que escribirá una biografía más extensa y muy documentada del beato, con el Sr. Rector de Santa María, la parroquia donde fue bautizado el Dr. Guardiet, Mn. Joan Serrabassa, a quien entregamos una reliquia del rector mártir, y con el concejal de cultura del Ayuntamiento de Manlleu, Sr. Álex Garrido. De aquí surgió la idea de hacer este acto de homenaje, conmemorando el 113º aniversario de la ordenación sacerdotal de Mn. Josep Guardiet y de su primera Misa, que celebró a la capilla de su casa natal, donde se ubica también la farmacia que fue de su familia y que también tuvimos ocasión de visitar.
Cómo leeréis la hoja poco antes de la realización de la visita, o simultáneamente a ella, no os podemos dar la crónica, ni deciros cómo ha ido. No queremos ser como aquellos que se inventan un reportaje antes de que el acontecimiento tenga lugar. Pero, por la ilusión que todos hemos puesto y por el trabajo que hemos invertido, estoy seguro de que el acto quedará muy lucido y tendrá un gran éxito, que Dios nos acompañará y que disfrutaremos de un gran día, en el que, con el gozo y el buen sabor de la fiesta, se estrecharán más los lazos fraternos entre las ciudades de Manlleu y Rubí, y entre las parroquias de Santa María y San Pedro. Para mí, esto forma parte de la gran obra que el Beato Josep Guardiet emprendió en Rubí y que nosotros continuamos en nuestra época; una obra que sigue y que el Dr. Guardiet, desde el cielo, mira con simpatía y hace que obtenga la bendición del Señor.